Kolme Novicio
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| Tema: Carta del Oblato Cisterciense Lun Ene 16, 2012 8:37 am | |
| - Citación :
El estatuto de Oblato Cisterciense, es un estatuto laico que permite al fiel comprometerse con la Abadía pero pronunciando los votos menores. Esta vía permite una aproximación íntima con el Altísimo. ¡Como miembro de pleno derecho del orden, podrá participar en las actividades y debate de la Abadía, cosa que no pueden hacer los laicos o visitantes...
Carta del Oblato Cisterciense
Preámbulo
El Orden Cisterciense que acoge a religiosos, acoge también a fieles. El fiele de la Iglesia que entra La Orden Cisterciense, se llama “oblato cisterciense” y sólo pronuncia los votos menores.
Convertirse en Oblato
El estatuto de Oblato está abierto al todos los fieles bautizados que prueban a encontrar su fe por un conocimiento pleno del dogma aristotélico. Este conocimiento básico es el eximido por los cursos de catecismo, otorgado por numerosos clérigos y seminarios antes del bautismo. Dicho esto, nuestro seminario da también este curso. El estatuto de oblato es un estatuto laico.
Compromiso del Oblato
Para ser nombrado oblato, es necesario haber pronunciado los votos menores. Estos votos son los de todos clérigos que reconocen la norma de San Benito y los valores cistercienses para los laicos.
Promesa de Estabilidad: Por el deseo de estabilidad en su comunidad, el hermano, confiando en la Providencia de Dios que lo llamó en este lugar y a este grupo de hermanos y hermanas, se compromete a trabajar allí, con constancia, los instrumentos del arte espiritual.
Promesa de Conversión de Vida: Por el deseo de conversión de vida, el oblato, buscando al Altísimo en la simplicidad de su corazón, bajo la conducta del Vida de Christos y el Libro de las Virtudes, se compromete a la disciplina cisterciense.
Promesa de Obediencia: Por el deseo de obediencia, el oblato, aspirando a vivir bajo una norma y un abad, promete realizar todo lo que los superiores legítimos pedirán según las presentes Constituciones. Renunciando así a su voluntad propia, seguir el ejemplo del Christos obedeciendo hasta la muerte y se compromete en el servicio de Dios.
Trabajo del oblato
El oblato forma parte de la comunidad cisterciense, por lo tanto debe como todos, ponerse a trabajar para esta familia. El papel del oblato es más concretamente trabajos manuales que intelectuales. Pues deben trabajar conjuntos en el ámbito, en el refectorio o también en otros lugares de la Abadía. Algunos oblatos pueden también trabajar en la biblioteca. Los oblatos llevan sus vidas fuera de la Abadía con sus familias, pero deben a pesar de todo dedicar un tiempo a la Orden.
Una vocación creciente
Al ser en la comunidad, algunos oblatos desarrollarán aún más sus vocaciones que otros y desearían pues convertirse en hermano de pleno derecho. Habrá posibilidad de continuar el noviciado cisterciense. El oblato podrá pedir su conversión a monje, que esto es vitalicio y con los votos de castidad.
Dejar el Orden
El oblato cisterciense puede dejar la Orden cuando le parezca bien, pero informando previamente al abad.
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