Llegada de Chemita

Chemita era casi un niño, acababa de nacer en Vic, en el Principat... su familia estaba muy lejos pero le habían hablado del aristotelismo... el domingo pasó por la Iglesia de Vic, entró a husmear... i la diacono de Vic le encaminó hacia esta abadía...

Hizo sonar los goznes de la puerta ¡POOOOOOM! ¡POMMMM! y quedó en silencio, esperando, sin saber muy bien qué... ni lo que hacía allí...

Parecía que nadie escuchaba su llamada... POOOM pOOOMM, quizas deba decir mi santo y seña.... se quedó pensando...

Nombre Ig Chemita, grita para que le escuchen, soy de Viiiiccccc, del Principat... abranme la puertaaa que cae un sol de justicia!!!!

La diaconisa de Vic le había dicho que la paciencia era una virtud...él no sabía que eran las vitudes, pero estaba aprendiendo a ser paciente.... se sentó en el suelo después de volver a llamar a la puerta....

Antes o después tendrán que abrir.... pensó Chemita... si no, volveré mañana...

Días después, alguien le había abierto la puerta, aunque él se había quedado dormido y ni se dió cuenta.... ahora ya estaba un poco perdido, entró en la Abadía pero por más que miraba no sabía ni lo que tenía que hacer, asi que echaba miguitas de pan para encontrar la salida, mientras investigaba.... ¿qué demonios hacía él allí? ¿qué estaba buscando? ¿iluminación?

Creía haber entendido que había un hermano portero, así que esperaría un poco... las palomas se estaban comiendo las migas, mejor no seguir avanzando...