Fray Moldot estuvo en silencio un instante, en el cual, le dió tiempo a reconocer al hermano Carolum. Moldot se decidió a hablar:
-Buenas noches, he venido a este Monasterio para quedarme definitivamente en él y vivir una vida monástica a la cual estoy dispuesto a seguir.
Carolum no reconocía aún a Moldot ya que este llevaba la capucha del hábito puesta.
-¿Pero quien sois?, ¡mostraos!.
-Con mucho gusto os mostraré mi rostro, hermano Carolum.-al decir esas palabras Moldot, Carolum se quedó pensativo en quien podría ser. Acto seguido, Moldot se bajó la capucha y mostró su rostro.
-Mi nombre es Moldot Corleone Lainez, no creo que sea necesaria más información hermano Carolum que la de notificarle que he pasado con éxito el seminario cisterciense en Noirlac para que usted me deje entrar en tan amable abadía de Vallbona, ¿verdad hermano?.